La pandemia de COVID-19 ha perturbado a muchas industrias y, como resultado, los estadounidenses que no pueden trabajar en casa, que han perdido horas de trabajo, o que no pueden trabajar en absoluto durante esta crisis, pueden estar enfrentando dificultades financieras graves. En respuesta, algunos bancos, compañías de servicios públicos y propietarios de propiedades individuales están reconociendo la necesidad de brindar flexibilidad para ayudar a las personas a mantenerse seguras durante este período.
Aquí se enlistan unos consejos para aplazar sus facturas o pagos, y cómo evitar las trampas que pueden dejarle financieramente vulnerable.